Desde hace tiempo, se han convertido en la mejor forma de comprar carburante, pagar peajes o hacer cualquier compra. Aunque el uso de tarjetas de pago está muy extendido entre los transportistas, el tipo de cliente medio es un profesional autónomo o empresa de unos cinco vehículos, que hace transporte tanto local, nacional o internacional. De hecho, se observa que esta herramienta es especialmente útil en el ámbito internacional, porque no obliga a llevar monedas de varias nacionalidades (aunque el euro ha facilitado mucho el comercio transnacional, todavía hay países que no han adaptado su divisa a la moneda única. Además hay empresas que también viajan a países no comunitarios).